El fenoxietanol (INCI: phenoxyethanol) es un conservante muy común en productos cosméticos y farmacéuticos. Su popularidad y amplio uso se debe a la búsqueda de alternativas de bajo coste a los parabenos, caídos en desgracia en la última década por sus efectos cancerígenos. Sin embargo, el fenoxietanol no está libre de controversia pues su exposición se ha relacionado con reacciones que van desde ezcema a reacciones alérgicas graves, afectación aguda del sistema nervioso central en niños y disfunciones endocrinas.
1. ¿Qué es el fenoxietanol?
El fenoxietanol o phenoxyethanol (CAS 122-99-6), es un conservante de amplio espectro de actividad antimicrobiana, eficaz contra bacterias gram-negativas (ej: Pseudomonas aeruginosa) y gram-positivas (ej: Staphylococcus aureus), así como contra levaduras (ej: Candida albicans). Su uso ha aumentado notablemente durante la última década paralelamente a la caída de los parabenos y conservantes liberadores de formaldehído. Ambas son clases de productos químicos con evidencia demostrable de riesgos potenciales para la salud, mientras que el fenoxietanol ha aparecido como una alternativa económica y relativamente segura para el mercado de la cosmética convencional.
La controversia respecto a su uso deriva de estudios que muestran efectos adversos a altas concentraciones. Al igual que pasó con los parabenos en su día, no está claro que efectos a largo plazo puede tener una exposición prolongada a concentraciones promedio del 0.5-1%. La duda razonable es motivo más que suficiente para buscar alternativas naturales, eficaces y seguras.
2. Producción
El fenoxietanol es un conservante sintético que se fabrica mediante un proceso complejo de etoxilación en el que el fenol reacciona con óxido de etileno a alta presión y temperatura. No es precisamente un proceso ecológico: el fenol es un derivado del petróleo y el óxido de etileno es un agente cancerígeno humano comprobado. Combinados durante la fabricación, teoricamente obtenemos un conservante sintético seguro e inócuo.
3. Un ingrediente demasiado común
Un estudio reciente realizado en España por el Servicio de Dermatología del Hospital Universitario de Guadalajara junto con la Universidad de Alcalá de Henares, muestra como el 43% de los cosméticos vendidos exclusivamente en farmacias, el 23% de los cosméticos vendidos en supermercados y el 14% de los cosméticos de herbolarios, contienen fenoxietanol. La imagen inferior refleja como el fenoxietanol se ha convertido en el principal conservante sintético en los productos de dermocosmética.
Por tanto, debemos tener presente que es un químico que encontraremos en todo tipo de productos dermatológicos y de cuidado personal, incluidos: filtros solares, cremas hidratantes, champús, acondicionadores, ungüentos, toallitas, jabones, rímel, contorno de ojos, espuma de afeitar y perfumes.
4. Mecanismo de acción
El fenoxietanol ejerce su actividad antimicrobiana al desacoplar la fosforilación oxidativa de la respiración y al inhibir competitivamente la malato deshidrogenasa. También actúa como un agente bactericida al aumentar la permeabilidad de la membrana celular a los iones de potasio y ejerce un efecto inhibitorio directo sobre la síntesis de ADN y ARN microbiano.
5. Toxicidad
Según el Comité Científico de Seguridad de los Consumidores –el CCSC, más conocido por sus siglas en inglés, SCCS, el fenoxietanol es seguro para todos los consumidores, incluidos los niños de todas las edades, cuando se usa como conservante en productos cosméticos a una concentración máxima del 1%.
Como podemos ver en la Ficha de Datos de Seguridad (SDS) el fenoxietanol es tóxico por vía oral e irritante ocular a altas concentraciones. Los productos cosméticos están formulados a un máximo legal del 1%, entonces ¿por que preocuparse?. La controversia deriva de nuevos estudios que muestran posibles efectos adversos, incluidos tóxicidad hepática, daño del sistema nervioso central en niños y problemas reproductivos.
Quizás el evento con mayor repercusión pública fue la retirada del mercado de la crema para pezones secos y agrietados de la marca Mommy’s Bliss. En 2008, la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) alertó de su uso en madres que amamantan a sus bebés, debido a las evidencias de efecto depresivo en el sistema nervioso central que conlleba una disminución en el apetito del lactante, vómitos, diarrea, dificultad para despertarlo, debilidad de las extremidades y cambio en el color de la piel.
“La FDA está particularmente preocupada de que los lactantes estén expuestos sin querer por sus madres a estos productos con efectos secundarios peligrosos”, manifestó en un comunicado la doctora Janet Woodcock, directora del Centro de Evaluación e Investigación de Medicamentos de la FDA.
En el mismo sentido, desde 2012, la agencia francesa ANSM (Agence Nationale de Sécurité du Médicament) ha recomendado que el fenoxietanol no se use en productos cosméticos destinados al aseo de bebés y que su contenido máximo se establezca en 0.4% para otros productos si está destinado a niños menores de 3 años. También denuncia su toxicidad hepática, sus efectos potencialmente dañinos para la reproducción y muchos otros inconvenientes: las conclusiones del informe ANSM de 2012 son alarmantes.
El fenoxietanol se ha relacionado con:
- daño renal y hepático
- toxicidad reproductiva y del desarrollo
- irritación de la piel
- reacciones alérgicas
- neurotoxicidad
Cuando un producto de esta naturaleza cada vez presenta mayores restricciones por parte de las autoridades sanitarias, mostrar excepticismo respecto a su seguridad a largo plazo es una conclusión más que razonable.
6. Alergias
Aunque a nivel general se trata de un conservante bien tolerado, el fenoxietanol puede causar reacciones de tipo alérgico en la piel en algunas personas. Varios estudios han demostrado que los humanos y los animales pueden experimentar irritación de la piel, dermatitis, erupciones, eczema y urticaria:
La imagen muestra el estudio realizado por Ramón Núñez Orjales, doctor de la unidad de alergología del hospital de Lugo, publicado en la revista J Investig Allergol Clin Immunol en la que se muestran los efectos de la exposición al 1% de fenoxietanol en la piel humana (concentración promedio en productos cosméticos).
El caso reportado más extremo causó urticaria y anafilaxia (una reacción alérgica extremadamente grave, sistémica y potencialmente mortal) en un paciente que usó productos cosméticos formulados con este conservante. Sin embargo, debemos tener presente que un choque anafiláctico por fenoxietanol es muy raro.
7. INCI: aprende a detectarlo
Si eliges evitar los productos que contienen fenoxietanol, consulta el listado de ingredientes (INCI) de tus productos cosméticos. Usualmente lo encontrarás indicado como Phenoxyethanol. Sin embargo, para intentar disimular su presencial algunos fabricantes pueden indicarlo con nombres más amigables como PhE o Rose ether:
Literatura científica consultada:
- Opinion of the Scientific Committee on Consumer Safety (SCCS).
- Contact urticaria caused by phenoxyethanol in ultrasound gel.
- Inhibition of some respiration and dehydrogenase enzyme-systems in E.coli by phenoxyethanol.
- Effect of phenoxyethanol on permeability of E.coli to inorganic-ions.
- Phenoxyethanol, reproduction and development: additional studies are needed.
- Probing the radical chemistry and the reaction zone of endocrine disruptor 2-phenoxyethanol.
- Allergy to methyldibromoglutaronitrile/phenoxyethanol (Euxyl k 400): regulatory issues, epidemiology, clinical characteristics, and management.
- Phenoxyethanol-induced urticaria.
- 2-Phenoxyethanol: a neurotoxicant?
- 2-phenoxyethanol-induced contact urticaria and anaphylaxis.
- Contact urticaria due to phenoxyethanol in an aftershave.
- Contact dermatitis from phenoxyethanol in aqueous cream.